Christian Pazmiño

Derecho y Tecnología

La evolución de la creación y consumo de los contenidos web

Hoy día por esas coincidencias de la vida llegué a uno de mis portales favoritos hace unos 10 años, me refiero a Slashdot.org. Tal vez en este momento las personas que leen esto no se acuerden del todo lo que hacía Slashdot, pero para mi en ese tiempo fue toda una revelación encontrar noticias «geeks» o como ellos dicen News for nerds, stuff the matters. Este Blog tenía demasiada información muy interesante que uno podía pasar horas leyendo un solo artículo, no por la extensión, si no que el mismo artículo podía referenciar a otros temas de interés que los adictos terminábamos aprendiendo no solo sobre arquitectura de software si no de tuning de aplicaciones.

En ese tiempo estaba empezando el bum de la generación de contenidos por parte de los usuarios utilizando blogs, por un lado estaba Blogger que ofrecía una plataforma para poder subir los contenidos enfocada a humanos, es decir muy sencilla de utilizar y con varias opciones para personalizar no solo el contenido sino la apariencia del blog. Para los mas avanzados se podía utilizar WordPress que requería de ciertos conocimientos técnicos y la inversión de algo de dinero para tener un hosting y un dominio. Estas aplicaciones permitieron que todas las personas que quería decir algo puedan obtener, con algo de trabajo y consistencia, una audiencia dispuesta a escuchar y a interactuar utilizando los comentarios. Y de está forma los contenidos se expandieron.

Blogger-de-Google

Así inicio mi adicción a los contenidos, la dosis diaria de información iniciaba con Slashdot y seguía abriendo pestañas, sí, pestañas yo utilizaba Opera, que me ofrecían contenidos de lo más diversos, la gran mayoría enfocados a tecnología.

En algún momento el mantener miles de pesteñas abiertas se volvía inmanejable y actualizar la página de mi preferencia cada cierto tiempo también se volvió poco eficiente.

Para entonces el estándar RSS ya existía y un pequeño portal ofrecía algo tan sencillo pero tan útil como agrupar todos los blogs en un solo lugar y poder obtener el contenido al momento de la actualización, casi inmediatamente. El pequeño utilitario se llamaba Bloglines, creo que una lágrima se genera en mi ojo izquierdo al recordar esos tiempos, ¿Mejores tiempos?. Tal vez.

Este pequeño portal se volvió tan importante ya que los amantes del contenido nos encontramos hipnotizados por la inmediatez de obtener tanta información.

En ciertas ocasiones el contenido era abrumante y se volvió una tarea titánica intentar leer toda la información.

Desde ese tiempo acá las cosas han evolucionado y la creación y el consumo de contenidos no ha cesado, ya sea por la facilidad con la cual aplicaciones como Twitter, Youtube, Tumblr, permiten a cualquier persona generar ese gran contenido o por el crecimiento incesante de la audiencia que pide cada vez contenido personalizado.

¿El futuro?, más contenido, mejor calidad y más demanda.

Imagen: Lifehacker

Previous Article

Deja una respuesta